lunes, 11 de octubre de 2010

El viaje a la felicidad



El viaje a la felicidad. Las nuevas claves científicas es el primer libro de la trilogía de Eduard Punset, que se completa con El viaje al amor (que empezaré en breve) y El viaje al poder de la mente (que también está en mi lista de espera).

El libro es fascinante, y Eduard Punset escribe como los ángeles, acercando al gran público descubrimientos científicos entorno a ese concepto tan abstracto y tan deseado como es la felicidad.

Empieza el libro con una introducción en la que recuerda que la búsqueda de la felicidad es una labor relativamente nueva, ya que hace poco más de un siglo, la esperanza de vida en Europa era de treinta años, de forma que las personas tenían el tiempo justo para crecer y desarrollarse y dejar descendencia antes de abandonar este mundo. Hoy en día vivimos muchos más años, y nos planteamos el futuro en otros términos.

Está claro que el viaje a la felicidad es incierto. No pocas veces las personas en realidad no sabemos ni lo que buscamos. Y recorriendo los diferentes párrafos podemos darnos cuenta de que en lo esencial podemos no ser tan diferentes de otros animales mucho menos evolucionados que nosotros, pues la parte que regula las emociones como la felicidad está en nuestro cerebro más primitivo, el que compartimos con la mayoría de los animales.

Un capítulo que me parece muy interesante es cuando desglosa los factores externos de la felicidad sin olvidar también el repaso a la felicidad programada, es decir aquellos aspectos que nos parece que nos hacen felices porque nos proporcionan placer como por ejemplo la comida, el sexo, la música, etc.

En las últimas páginas me parece muy original la idea de intentar crear una fórmula de la felicidad. Supongo que lo difícil es saber poner cada cosa en su sitio y que al final el resultado nos deje satisfechos.

Del libro yo he sacado dos conclusiones: la primera es que probablemente la felicidad es el camino y no el destino; y en segundo lugar es que hay que ser empático con uno mismo y aceptar lo que nos viene dado, tanto genética como externamente.

miércoles, 6 de octubre de 2010

Lo verdadero es un momento de lo falso

Lo verdadero es un momento de lo falso es la última novela de Lucía Etxebarría y prácticamente acabo de cerrar el libro tras 406 páginas de historia.

La novela narra diferentes historias entrelazadas a partir de la familia, los amigos y las novias de un cantante de un grupo de moda, al que apodan Pumuky, y cuyo cadáver se encuentra en un pinar a las afueras de Madrid. Los diferentes personajes crean una red enmarañada en la que a duras penas logras adivinar qué ocurre finalmente. Sexo, drogas, música, vida nocturna, relaciones cruzadas, egos insuperables, etc.

Lucía Etxebarría es una autora que no da pie a medias tintas: O te gusta o la odias. A mí me gusta como escribe y también algunos de los temas de los que trata, porque en sus colaboraciones en prensa escrita escribe con frecuencia de temas de educación. No en vano tiene una hija que si no me equivoco debe ser más o menos de una edad parecida a la mía. He recomendado por activa y por pasiva el libro de El club de las malas madres aunque en ese libro el mérito principal creo que es del coautor del libro, Goyo Bustos, que es docente.

En sus novelas trata con mucha frecuencia historias con alto contenido erótico y con la presencia de drogas. No obstante logra una buena descripción de los personajes, aunque en muchas ocasiones se echa de menos una perspectiva más global y no tan centrada en ámbitos tan concretos.

Lo verdadero es un momento de lo falso es una novela entretenida, cruel en algunos tramos, sensible sobre todo en los fragmentos finales y donde tras cada página tienes ganas de saber un poco más. Si bien al final no aclaras completamente tus dudas y te gustaría que tuviera algún capítulo más.

Suite francesa

Suite francesa es la novela póstuma de Irène Némirovsky, autora rusa que vivió la mayor parte de su vida en Francia.

Es un libro que no sé si me regalaron o compré hace ya dos o tres años porque había oído muy buenas críticas. Recuerdo que lo había ojeado y decidí postergar su lectura, seguramente porque no debía tener ánimo de leer un manuscrito que hablara de miserias relacionadas con la guerra.

Hace unos días decidí animarme tras leer una crítica de nuevo en El País, esta vez de Mario Vargas Llosa.

El contexto del libro lo encontramos en la II Guerra Mundial y está dividido en 2 partes. La novela según estaba planteada inicialmente contaba con 5 partes. En la primera parte - la más dura- narra la experiencia de diferentes personajes cuando huyen de París al saber que los alemanes han derrotado al ejército francés y están a punto de entrar en su capital. La huída con lo puesto, con la desesperanza, con la incertidumbre del dónde ir y cómo llegar, es un relato desgarrado de en qué nos convertimos las personas en momentos difíciles. Llega un punto de la guerra y de situaciones límite en la que puede ser igual que seas rico o que seas pobre, que tengas muchas y buenas influencias o que nadie te pueda sacar las castañas del fuego.

La segunda parte es un poco más suave. Los alemanes ya han ocupado las diferentes ciudades francesas y empieza la convivencia. Desde la perspectiva de una Francia rural, con el paso de los días surgirán algunas relaciones de amor y de amistad entre personas de diferentes bandos y de diferentes pasados y futuros. Es un buen ejemplo de cómo en todas las situaciones al final lo importante son las personas, cómo son y cómo se comportan independientemente del contexto y de lo que nuestra razón nos indique.

El libro está sensacionalmente bien escrito. Me parece de lo mejor que he leído en los últimos tiempos. Además resulta desgarrador conocer la historia de la autora. Escribía de forma contemporánea a los hechos y no conoció el final de la guerra, ya que fue deportada a un campo de concentración por ser judía y exterminada como tantos otros en el año 1942. La crudeza de las letras del libro se incrementa en los documentos añadidos al final de la edición que yo he leído. Por un lado hay apuntes sobre la novela que la autora va haciendo y a continuación correspondencia mantenida entre la autora y su editor, entre el marido -Michel Epstein- y los diferentes contactos que tenían una vez ella fue detenida. Y se adivina el triste final -el marido también acaba siendo deportado-, velando en las últimas cartas por salvar a las dos hijas del matrimonio.

Las hijas conservan el manuscrito durante muchos años. La nostalgia les impide durante mucho tiempo leer el contenido de la documentación perteneciente a su madre. Muchos años después, cuando las dos hijas de Irène ya son ancianas, el manuscrito verá la luz como la fascinante novela que resulta ser Suite francesa